La NBA define a la perfección el por qué al baloncesto se le conoce como el deporte ráfaga. Este martes, en un encuentro de alarido, los Lakers de Los Ángeles vencieron el martes 108-102 en tiempo extra a los Minnesota Timberwolves en el repechaje a playoffs y se citaron con los Memphis Grizzlies en la primera ronda de las eliminatorias.
Si hay algo que se mira en los equipos que juega LeBron James, es el espíritu de lucha que contagia el veterano jugador y el cuadro angelino no fue la excepción.
Con una titubeante primera mitad y mal inicio del tercer cuarto, los angelinos llegaron a estar abajo hasta por 15 unidades, sin embargo, se rehicieron en la prórroga de un frustrante final de tiempo reglamentario, cuando el base Mike Conley empató el partido con tres agónicos tiros libres a solo 0,1 segundos del final.
El Rey James y Anthony Davis regresaron a ser esa dupla letal que años atrás llevó a L.A. a levantar el Trofeo Larry O’Brien. LeBron terminó el duelo con un doble-doble al registrar 30 puntos y 10 rebotes, mientras que La Ceja cerró con otro doble dígito en dos estadísticas: 24 unidades y 15 rebotes.
Los Lakers serán el séptimo sembrado en la Conferencia Oeste y jugarán la primera ronda ante los Grizzlies, que se encuentran segundos. Minnesota todavía puede clasificar a los playoffs si supera el viernes al vencedor del cruce del miércoles entre los New Orleans Pelicans y los Oklahoma City Thunder.